Domingo Décimo Tercero del Tiempo Ordinario  -  Año B
Mc 5:21-43

1.- En este Evangelio se nos narran dos milagros de Jesús: la hemorroísa y la resurrección de la hija de Jairo.

2.- La lección de este Evangelio es que los milagros dependen de la fe.

3.- Hay muchas imágenes milagrosas del Señor y de la Virgen. Todas son obra humana. El que sean milagrosas o no depende de la fe de la gente que ora ante ellas.

4.- Hay reliquias que son auténticas y otras que no lo son. El que hagan milagros no es señal de que sean verdaderas. La autenticidad hay que probarla históricamente y científicamente. Pero aunque no sean auténticas pueden hacer milagros si la fe de la gente lo merece.

5.- Pero los milagros no dependen sólo de la fe. A veces pedimos con mucha fe, y Dios no nos concede lo que pedimos.

6.- A veces es que no nos lo merecemos. Pero otras veces es que no nos conviene lo que pedimos, o que Dios quiere probar nuestra perseverancia.

7.- El que Dios no nos conceda lo que le pedimos al momento, no debe desanimarnos a seguir pidiendo. Es posible que Dios nos lo conceda más adelante. Y si no nos concede lo que le pedimos, porque no nos conviene, nos concederá otra cosa, pero la oración que sube al cielo nunca vuelve vacía.