UENTOS PARA PENSAR VI 210º Los presentimientos y las gaviotas sabias
Un maestro estaba en contemplación cuando sintió un peligro, pero no vio que a un muchacho que se le había acercado de atrás. Charlando con él, el muchacho le confesó que el maestro no hubiera podido defenderse si él lo hubiera golpeado de atrás con su espada afilada como tenía intención de hacer. No lo había hecho porque el maestro se había dado vuelta y pudo disimular su intención. Un muchacho vivía al borde del mar y le gustaban las gaviotas que se le acercaban sin miedo. Su padre, un día, le dijo: “atrapa algunas gaviotas que las vamos a comer”. El muchacho se fue a la playa, pero aquel día ni una gaviota se le acercó. ¿Presentimiento? ¿Qué son los presentimientos? Es imposible racionalizar el misterio del hombre. Mucho queda por conocer y nunca llegaremos a conocernos totalmente. Podemos distinguir, grosso modo, es decir, de manera sencilla y grosera, cuatro niveles en la estructura del hombre: el nivel físico, que se refiere al cuerpo; el nivel psicológico que se refiere a los sentimientos y emociones que acompañan continuamente nuestra existencia; el nivel ético, de la personalidad madura, de las decisiones conscientes y responsables y finalmente el nivel religioso de las relaciones con el Dios trascendente. Faltaría indicar también el nivel de la profundidad, del inconsciente, pero lo incluimos con la dimensión psicológica. Los presentimientos no tienen una relación necesaria con lo religioso, con lo sobrenatural, sino que se ubican en el nivel psicológico. Es un hecho de que a veces pre - sentimos, es decir, sentimos antes lo que pronto va a suceder. En la Biblia se habla mucho de sueños premonitores, casi una manera de contacto con Dios o una manera de conocer su voluntad. Muy conocidos son los sueños de S .Juan Bosco que casi continuamente le indicaban lo que tenía que hacer. 211º Diógenes a Alejandro: “¿Por qué no te decides hoy? Alejandro el grande, había hablado largo y tendido con el filósofo Diógenes y se convenció de su sabiduría. Al marcharse le dijo: ruego a los dioses que en la vida que me toque en mi próxima reencarnación no sea yo Alejandro sino Diógenes. Y Diógenes le contestó: ¿”A qué esperar, para ello, a tu próxima reencarnación? Puedes serlo desde ahora si así lo deseas”. Existe un diablo que se llama "mañana" y siempre nos aconseja dejar para mañana lo que tendríamos que hacer hoy. Es el diablo de le pereza que nos tienta a evitar el compromiso y a quedarnos a la ventana para ver qué pasa en el mundo. "Vamos a ver que pasa" decimos muy a menudo. S.Agustin, antes de su conversión, sentía que tenía que dejar de convivir con aquella mujer con la que estaba unido de hecho sin compromiso ninguno. Pedía a Dios el don de cortar con aquella relación y su oración era esta: "Dame o Dios el don de la castidad". Pero horrorizado por si Dios escuchase esta oración y le diese la gracia de ser casto, proseguía diciendo "pero no hoy, mañana".. 212º “Te haré fusilar el viernes.......Domingo hablaremos de tu nueva religión. Durante la revolución francesa un tal Larevelliére se presentó a Napoleón para persuadirle que le apoyase en el propósito de fundar una nueva religión. “Estoy dispuesto a ayudarte” respondió Napoleón, “pero, para sustituir el cristianismo por otra religión, será necesario que tú presente argumentos convincentes en favor de ella. Por eso, hagamos así.: viernes próximo por la tarde yo te haré fusilar y tú el domingo siguiente, por la mañana, resucitará y volverás a verme. Podremos así ponernos de acuerdo. El argumento decisivo de que la religión cristiana es la única verdadera, aunque todas son válidas para la salvación, es que su fundador, Jesucristo, resucitó de la muerte. De ningún fundador de religiones se testimonia que haya resucitado de la muerte. Sólo de Jesús se predica que apareció a sus discípulos y que su tumba se ha encontrado vacía. Dios Padre dejó que crucificaran a su Hijo encarnado,, Jesucristo, pero lo resucitó de la muerte y garantizó, así, todo lo que Jesús había hecho y enseñado. Decía S.Pablo a los corintios: "Si Cristo no fue resucitado, nuestra predicación ya no contiene nada ni queda nada de lo que creen ustedes......seríamos los más infelices de los hombres" (1 Cor 15,14.19) 213º Divorcio.....y los tres hijos ¿con quien? Un matrimonio, tras doce años de peleas se iba definitivamente a pique. Las violentas disputas que sostenían los esposos dieron lugar a que se entablara el pleito de disolución. Naturalmente cada cual quería quedarse con los hijos, que eran tres. Después de oír ambas partes, el juez dictó una inesperada sentencia. “Ambos quieren mucho a sus hijos. Pero, ¿cómo se pueden dividir en partes iguales si son tres? Voy a darles un consejo: váyanse a casa, tengan otro hijo; luego vuelvan y ya resolveremos el problema”. Al año siguiente llamaron al juez para que fuera de padrino al cuarto hijo...de la pareja reconciliada. A veces el egoísmo de los padres los hace ciegos tanto que no se dan cuenta de la repercusión negativa que tienen en sus hijos sus discusiones y peleas. Los que más sufren de la separación de los padres son los hijos, que se quedan desamparados por la falta de amor y unidad de los padres. Los hijos nacen como fruto del amor y se apoyan en este amor que le ha dado la vida. Cuando los padres se separan, les parece que se desmorona su mundo, que se abre la tierra bajo los pies, que todo tambalea y flotan en el aire. Con eso no se quiere afirmar que cualquier convivencia de los esposos sea positiva. Es también trágico vivir entre continuas peleas y conflictos. Pero, que la separación sea un menor mal, esto no significa que es un bien. 214º Solo doscientos sesenta y nueve (269) años de paz Según un cálculo realizado años atrás, durante los últimos treinta y ocho siglos, sólo ha habido 269 años sin guerras, mientras se han firmado 1500 tratados de paz y arbitraje. ¿Cuál ha sido el resultado de dichos tratados? Si se saca el promedio a ese conjunto de datos se verá que cada tratado ha permitido al mundo solo dos meses de paz. Es de veras un escándalo que después de 2000 años de evangelización, las mismas naciones cristianas pasen de una guerra a otra casi sin parar. Cristo que fue anunciado "Príncipe de la paz" saludaba a sus discípulos después de su resurrección: con este augurio: "La paz esté con ustedes", ¿Cuánto falta todavía para que los cristianos tomemos en serio este mandato de Cristo? 215º La verdadera política cristiana es estar del lado de Dios. Un amigo quería consolar a Abraham Lincoln entonces presidente de los EE.UU. Eran momentos difíciles, cuando todo parecía irle mal. “Espero que Dios esté de su lado” le dijo el amigo. Y Lincoln le contestó: “No me preocupa semejante cosa, porque bien sabemos que Dios está siempre con la justicia. Mi preocupación y mi plegaria es que esta nación y yo estemos siempre del lado de Dios. Padre, me rogaba una madre, le pido que ponga las manos sobre la cabeza de mi hijo para que Dios lo proteja siempre y no aleje sus manos de él. Al que yo le dije: voy a rezar para que este hijo suyo no deje de tener la cabeza bajo las manos de Dios. La libertad de Dios no es como la libertad humana que consiste en la capacidad de elegir entre el bien y el mal moral. Siendo Dios bondad infinita, no puede optar por el mal. De manera que, como se nos dice en la anécdota, lo que importa no es que Dios esté en favor de la justicia, nunca podrá estar en contra. Lo que estará por verse es que nosotros estemos al lado de la justicia y de Dios. El hombre puede hacer el bien porque Dios lo creó bueno; pero puede hacer el mal porque su bondad es limitada y su limitación consiste exactamente en la posibilidad de inclinarse al mal. 216º Hay que amar los ‘dientes de león’ que no se pueden arrancar. Un hombre se sentía muy orgulloso del césped de su jardín. Un día encontró que en dicho césped habían crecido unos cuantos “dientes de león”. Trató por todos los medios de librarse de ellos, pero no pudo impedir que se convirtieran en una auténtica llaga. Al fin escribió al ministro de agricultura refiriéndole todos los intentos que había hecho y concluía la carta preguntando: ¿”Qué puedo hacer”? Al poco tiempo llegó la respuesta: “Le sugerimos que aprenda a amar a estos dientes de león”. No tenemos el derecho de cambiar a los demás. Lo único que depende de nosotros es cambiarnos a nosotros mismos dando un ejemplo a los demás para que ellos también cambien. A los demás tenemos que aceptarlos así como son aunque con el deseo de que se corrijan de sus defectos. Tenemos que comportarnos como el médico que ama al enfermo aunque no esté de acuerdo con su enfermedad. 217º El águila real se resignó a vivir como gallina. Un hombre encontró un huevo de águila. Se lo llevó a casa y lo colocó en el nido de una gallina de corral. El huevo de águila fue incubado y nació junto con los demás pollitos, creció con la nidada y a lo largo de toda su vida hizo lo mismo que hacían los otros pollos. Escarbaba la tierra en busca de gusanos e insectos, piaba como los demás y nunca tentó de volar, sino que como todas las gallinas no podía sino saltar y volar por algunos metros no más. Pero un día, levantando los ojos, vio allá arriba en el cielo una magnífica ave que flotaba elegante y majestuosa por entre las corrientes de aire, moviendo apenas sus poderosas alas. El aguilucho miraba asombrado hacia arriba. ¿”Qué es eso”? Preguntó a una gallina que estaba junto a él. “Es el águila, el rey de las aves” respondió la gallina. Pero no pienses en ello, Tú y yo somos diferentes” .Y el águila, criada con las gallinas vivió y murió creyendo que era una gallina de corral. Había renunciado a ser lo que era, un águila real. Un famoso dicho reza así:: “Decíme con quien andas y te diré quien eres”. Nos conformamos fácilmente con los de nuestro grupo de amigo o compañeros. No tenemos la fuerza de voluntad para vivir según nuestros convencimiento y nuestra fe. Nos acobardamos Hechos a imagen y semejanza con Dios, y sobre todo, renacido por el agua y el Espíritu santo nos olvidamos de nuestra dignidad de hijos de Dios y discípulos del Señor. Jesús. Como Pedro en el patio del tribunal donde se juzgaba a Jesús, nos acobardamos a la primera contrariedad y no somos capaces de profesar con seguridad nuestra fe. Vivimos como los demás, nos conformamos con este mundo del cual Jesús no nos quiso alejar pero del cual nos quiso defender. "No te pido Padre que los saques del mundo, pero sí que los defiendas del Maligno" (Jn 17,15) Si nuestro interés se concentra únicamente en los bienes materiales, si cortamos las alas a nuestros deseos de algo superior, corremos el riesgo de conformarnos a este mundo y reducir nuestras aspiraciones que nos conducirían a ser verdaderos discípulos de Jesús, auténticos cristianos. Nos limitamos a ser bautizados, a haber nacido de Dios, pero no nos comportamos como tales. Tal cual el aguilucho que aunque había nacido de un águila se conformó a vivir como gallina. 218º No hables sino cuando la palabra es mejor que el silencio. Había un monasterio cuya regla no era: “No hables”, sino “No hables si no es para decir algo que sea mejor que el silencio”. En el evangelio de Mateo encontramos un dicho de Jesús que nos impresiona bastante. "En el día del juicio los hombres tendrán que dar cuenta hasta de las palabras ociosas que hayan dicho" (Mt 12,36) El silencio, que se nos recomienda, tiene como fin hacer que no nos dejemos llevar por palabras inútiles, sin valor ni sentido. El apóstol Santiago llega a decir que "Si alguien no peca con la lengua, es un hombre perfecto, capaz de dominar toda su persona" (St 3,2). En efecto, sigue diciendo: "La lengua es algo pequeño, pero puede mucho" es decir puede hacer mucho bien y mucho mal y es difícil controlarla... 219º “No pienso más en mi ex marido”. Pero lo decía llorando. Una amiga me contaba que su divorcio había sido una separación dolorosa. Su esposo se había enamorado de una mujer más joven y le anunció repentinamente que la dejaba para irse a vivir con ella. Se sucedieron meses de amargas disputas por la casa, el dinero y la custodia de los hijos. Ahora, al cabo de unos meses, decía que su independencia le resultaba atractiva y que se sentía feliz de estar sola. "No pienso más en él...realmente no me importa" dijo.. Pero mientras lo decía, los ojos se le llenaron de lágrimas. Esas lágrimas repentinas podrían haber pasado inadvertidas. Pero darse cuenta de que el lagrimeo de alguien significa que está triste a pesar de que dice lo contrario, es un acto de comprensión tan claro como lo es el desentrañar el sentido de las palabras de una página impresa. Uno es un acto de la mente emocional, el otro de la mente racional. En un sentimiento my real. Nosotros tenemos dos mentes, una con la que pensamos y la otra con la que sentimos.. 220º “Le vamos a permitir salir de vacaciones con el novio?” "Ayer discutimos, mi esposa y yo, porque nuestra hija (22 años) por primera vez nos ha pedido poder salir de vacaciones con su novio. Sabemos que son dos muchachos serios, pero yo no estoy muy de acuerdo con la idea. Mi esposa en cambio se muestra más abierta y teme los efectos de una negativa de parte nuestra ¿qué hacer? Quisiéramos conocer su opinión de psicólogo cristiano". Queda sobre la mesa el delicado problema de la relación entre padres e hijos adultos. Una relación que no siempre es fácil. Recogí hace tiempo el desahogo de un novio que acusaba a sus padres de tener el tabú del sexo, ya que cada pedido era interpretado desde esa óptica. "Nosotros - me confesaba - salimos juntos con muchos amigos sólo porque nos gusta estar en grupo y vivir juntos la naturaleza". Me ha preocupado esta lectura de una actitud de protección y preocupación, aceptable, en varios aspectos y común en muchos padres. Sin embargo tenemos que reconocer que no siempre hemos estado dispuestos a entrar en ese rol flexible que requiere de a poco la vida al lado de los hijos. Un papel menos protagonista, pero cada vez más profundo espiritualmente, orientado con generosidad a la acogida y a la misericordia. Se precisan confianza y firmeza a la vez, sin esas preocupaciones ansiosas o durezas infructuosas. Es así que se adquiere la luz suficiente para ver las vicisitudes de la vida, y por lo tanto autoridad y confianza ante nuestros hijos. Repetimos también a ustedes la sugerencia que hemos dado a muchos padres ansiosos: se precisa cierto desapego de los hijos, verlos como prójimos que servimos y aconsejamos. Las palabras de Jesús: "Aquel que no deja padre, madre, hijos...."Valen para todo cristiano. Después, si todo parece un fracaso, tratemos con amor de ir más allá de todo dolor. Sólo así tendremos esa pizca más de sabiduría, no para dar consejos humanos, sino para llegar hasta el corazón de nuestros hijos. Respuesta de Nestor Pozzi 221º “No se acerquen a aquella vieja”. Y ‘aquella vieja’ limpiaba la playa de los vidrios. Se encontraba una familia de cinco personas pasando el día en la playa. Los niños estaban haciendo castillos de arena junto al agua cuando, a lo lejos, apareció una anciana, con sus canosos cabellos al viento y sus vestidos pobres y harapientos. Parecía hablar entre sí y recogía cosas y cosas que introducía en una bolsa de plástico. Los padres llamaron junto a sí a los niños y les dijeron que no se acercaran a la vieja. Cuando ésta pasó junto a ellos, ella dirigió una sonrisa a la familia. Pero nadie le devolvió el saludo. Semanas más tarde supieron que la anciana había muerto y sólo entonces se enteraron que aquella vieja había pasado los últimos años de su vida liberando la playa de vidrios y de latas cortantes para que los niños no se hirieran los pies. Jesús nos prohibe tajantemente juzgar a los demás. ¿Por qué no tenemos que juzgar? Simplemente porque no podemos; por que no tenemos una luz para penetrar en las intenciones y responsabilidades de los demás., Podemos, esto sí, juzgar los hechos externos, pero no la responsabilidad subjetiva del hecho, que solo Dios conoce. Dios penetra en la interioridad del hombre y sólo Dios es el juez que puede juzgar. "N juzguen y no serán juzgados" (Mt 7,1). En el pecado podemos distinguir el aspecto objetivo y el aspecto subjetivo. Podemos ver y juzgar el aspecto objetivo del pecado, pero no podemos medir su dimensión subjetiva. S.Pablo, cuando nos dice que estamos en condición de distinguir el bien del mal y de juzgar también a los ángeles, (1 Cor 6,3) se refiere al hecho de que por la fe estamos en condición de juzgar los hechos visibles del mal. La fe nos hace participar del pensamiento de Dios y por la fe podemos distinguir lo que está en favor o en contra del plan de salvación. Pero, de ninguna manera, quiere decirnos que podemos juzgar a los demás en cuanto a su vida interior. La dimensión subjetiva del pecado sólo Dios la puede conocer. "El que juzga es el Señor" (1 Cor 4,4). 222º ¿ Es posible amarse viviendo siempre juntos? Tras una acalorada discusión con su mujer, el marido acabó diciendo: ¿”Por qué no podemos vivir junto en paz como nuestros dos perros, que nunca se pelean”? “Claro que no se pelean”, respondió la mujer. ”Pero átalos juntos y verás lo que pasa.”. No es tan difícil amar de palabras a los lejanos. Los que están lejos son como si no existieran y no nos cuesta nada decir que los amamos. Lo que sí cuesta es amar a los vecinos, los que viviendo a nuestro lado, nos pueden molestar con sus defectos y ponernos en crisis por su conducta. ¿Respondió bien esta mujer a su marido? ¿Se puede comparar el matrimonio a dos animales atados por una cuerda? Es cierto que, cuando falta amor, el lazo matrimonial se convierte en una cuerda que impide la libertad. La respuesta de la mujer decía claramente que el matrimonio, para ella, se había convertido en una prisión. Pero si hubiera amor, vivir juntos no sería un peso sino una libertad. Donde hay amor hay libertad. Sin amor, la convivencia se convierte en una esclavitud. 223º Aquel hombre sembraba semilla de dátiles. Se acercaba el tiempo de la lluvia y un hombre muy anciano estaba cavando hoyos en su jardín. ¿”Qué haces”? le preguntó su vecino. “Estoy plantando dátiles” respondió el anciano. ¿”Y esperas llegar a comer dátiles de esas semillas que estás plantando"? “No, no pienso vivir tanto. Pero otros lo harán. Se me ocurrió que toda mi vida he disfrutado comiendo dátiles plantados por otros y ésta es mi manera de demostrarles mi gratitud”. El amor a los demás tiene que superar el estrecho nivel de la horizontalidad geográfica y temporal.. Hay que amar también a los que nacerán después de nosotros. El amor tiene que ser gratuito y por eso no puede limitarse a la regla de oro: "Haz a los demás lo que quieres que los demás hagan a ti". No hay que hacer el bien esperando que otros hagan lo mismo por mi. "Si ustedes aman a los que los aman, ¿qué premio merecen? (Mt 5,46). Cada generación tiene que pensar a la siguiente y dejar esta tierra en buenas condiciones y no contaminada, agotada, explotada como estamos haciendo. El problema ecológico es uno de los desafíos más difíciles que tenemos que solucionar. 226º El aprecio puede cambiar a un gerente difícil a soportar. En una de sus reuniones de reflexión bíblica, los miembros del grupo se quejaban de que el gerente de la empresa, donde trabajaban, era un tipo imposible a aguantar. Decían que era el hombre más argel que se podía imaginar. Yo, que orientaba el grupo en su oración y actividad apostólica, le sugerí que intentaran demostrarle su aprecio y vieran qué ocurría. Lo hicieron y...nada ocurrió. Les dije que insistieran en tratarlo amigablemente, que le sonrieran, le saludaran y fueran siempre gentiles con él. Después de cuatro meses, nada había cambiado y los del grupo comenzaron en desanimarse. Pero le insistí a que no dejaran de seguir con el método que les había indicado. Al años siguiente algo se notó: el gerente empezó a reaccionar positivamente. Primero les devolvió el saludo; después de un tiempo empezó a sonreírles y a los dieciocho meses era un hombre diferente. El persistente amor de ellos disolvió la armadura de egoísmo de aquel gerente y lo convirtió en un nuevo ser. Fue hermoso. Tomó tiempo y dedicación, pero los protagonistas se dieron cuenta que no sólo ellos sino también el gerente tuvo que hacer un esfuerzo notable para superar su forma de ser y cambiar... La venida de Jesús a la tierra fue un gesto de apreciación. No merecíamos nada: "Cristo murió por nosotros cuando todavía éramos pecadores.. ¡Qué prueba más grande del amor de Dios por nosotros!" ( Rom 5,8) No esperó que nosotros mereciéramos ser amado, sino que nos amó y su amor nos hizo amables.. Podemos decir con toda verdad que Dios no nos ama porque somos amables sino que somos amables porque Dios nos ama. Es el amor de Dios que nos hace preciosos a sus ojos. Así, aquel grupo, se realizó lo que Dios hizo con nosotros, fueron la amabilidad de los dependientes, su constancia a apreciar aquel gerente, que lo cambió totalmente. 230º “El peor de los pecados es oponerse a la alegría.” En la India decimos que una buena carcajada vale una hora de yoga. Decía Tagore: "El peor de los pecados es oponerse a la alegría." Nunca ha sido más verdad el dicho de Jesús: "Den y se les dará"(Lc 6,38).Quien reparte alegría recibe alegría. Quien se acerca a los demás para despejar una preocupación, aliviar una pena, alegrar un rostro o poner un toque de humor en una reunión, verá sus propias preocupaciones desvanecidas y sus penas reducidas. Un encuentro en la calle, una conversación de negocios, o incluso el trabajo diario, el atender a clientes, pacientes, el enseñar en una clase, el hablar por teléfono o contestar a preguntas...todo eso puede hacerse con buena cara, con tono alegre, con vivacidad comunicativa, con gracia y humor, con entrega y cariño...o puede hacerse con dureza y desprecio, con aburrimiento y fastidio, con mala cara y peor tono. Claro que la práctica no es tan fácil; hay gente que nos pone los nervios de punta, aunque sólo los veamos un minuto; hay caracteres y caracteres; hay cansancio, molestia y burocracia oficinista; hay estupidez humana y a veces te viene la gana de tirar al prójimo por la ventana, que sería la mejor manera de acabar con el asunto ...Pero el poner en lo posible una pincelada de color en cada situación y una nota de melodía en cada conversación, va a alegrar el día a un buen número de personas, y, de rebote, a nosotros mismos. La risa denota salud y trae salud. Y como la risa es contagiosa, al reír de verdad hacemos reír de verdad a los demás. Esta ha sido una página estupenda de C. .Vallés "Estén siempre alegres" (Fil. 4,4) 231º Hay que festejar también la tristeza porque es parte de la vida. ¿Y que tal la tristeza? Si estás triste.. no te identifiques con la tristeza. Hazte testigo de tu estado de alma y disfruta ese momento de tristeza, porque la tristeza también tiene su belleza. Nunca la has observado. Te identificas tanto con tu estado de ánimo que no tienes distancia para ver la belleza de un momento triste. Si te observas bien, verás qué tesoros te has perdido hasta ahora. Cuando estás contento, nunca tiene tu vida la profundidad que tiene cuando estás triste. La tristeza tiene profundidad; la felicidad tiene un toque de superficialidad. La tristeza no son las olas de superficie, es la profundidad misma del océano Pacífico: millas y millas sin fondo. He aquí otra página de C.Vallés que nos dice cómo encarar la tristeza cuando viene. La vida tiene su polaridad. La felicidad es un polo; la tristeza , el otro. Y para celebrar la vida tienes que tomarla en su totalidad. Sin totalidad no hay celebración. Una vida que tenga sólo beatitud, tendrá extensión, pero no tendrá profundidad. Así como una vida que tenga sólo tristeza no tendrá amplitud. Necesitamos todas las dimensiones de la vida para vivirla plenamente. La vida entera, toda la vida es buena. Hay que tomarla en su totalidad para celebrarla. La celebración no puede someterse a condiciones diciendo: "Celebraré la vida cuanto esté contento" No celebraré la vida también cuando no esté contento" La celebración es incondicional. Yo celebro la vida, y la vida está ahí para celebrarla. 235º ¿Es posible ser católico e pertenecer a la masonería? Un hecho impresionante sacado del proceso para la beatificación de Mons Comboni me obligó a interrogarme sobre la masonería. Mons Comboni, una noche, en París, ha sido intervistado por un señor que le pidió que lo acompañara para asistir a una persona que estaba en punto de muerte. Llevado al lugar por un coche cerrado, fue introducido en un cuarto donde tendría que encontrarse el moribundo. Con gran maravilla se encontró delante de un señor que inmediatamente le dijo: "Padre, yo soy católico y estoy por ser ejecutado. Pero antes de morir quiero purificar mi conciencia. Soy masón y me han dado la orden de matar a un sacerdote. Como católico me negué y por eso he sido condenado a muerte por la asociación. Por favor, vaya a mi hija hermana religiosa y le entregue esta carta para que sepa que no me he suicidado como dirán los diarios cuando se encontrará mi cadáver." De este hecho de deduce que afiliarse a la masonería implica una obediencia absoluta. Hay de aquel que discute o desobedezca. Podría terminar como Roberto Calvi(como dicen ciertas voces). Cuando se descubre que en Sicilia la masonería y la mafia actúan de común acuerdo, se difunde la voz que es una masonería desviada ¿Estamos seguros de esto? Creo que convenga advertir a los católicos porque he oído que un sacerdote decía que la masonería es una asociación buena” (Cfr Cittá nuova (Nov. 1996). La respuesta de la revista Cittá nuova fue la siguiente: "Para un cristiano la masonería es incompatible con su fe. Hay en efecto una diversidad esencial entre los principios cristianos y los de la masonería. La masonería es una organización con una jerarquía rígida, con grados de pertenencia siempre más estrechos, con la obligación de conservar el secreto y con ideas fundadas sobre el racionalismo y el naturalismo que no armonizan con la fe cristiana. Que existan hoy, en toda las logias masónicas, criterios tan despiadados como lo que hemos leído, no lo podemos afirmar con toda seguridad.. Lo mejor es no adherir a la masonería. Esto no significa que no se pueda dialogar y también colaborar con gente afiliada a la masonería cuando se trata de cosas buenas como la promoción de la paz, etc. como se hace siempre con todos los hombres de buena voluntad. Podemos pensar que existen también masones buenos. 239º “No acepto un mundo en el que los inocentes sufren”(Dostoijevski). Eh aquí una página impresionante de Dostoijevski en su novela “Los hermanos Karamazov”. Ivan, el ateo, discute con su hermano Alioscia: “ Cómo es posible creer en la bondad, la omnipotencia y la sabiduría de Dios mirando el suplicio y la muerte de aquel niño que murió destrozado por los perros azuzados contra él por su padre encolerizado? O pensando en aquella niña abandonada en medio de la basura y las torturas del hambre y la sed a que la sometieron sus crueles padres? ¿Comprendes este absurdo, amigo y hermano mío? - pregunta Ivan a su pacífico hermano Alioscia. ¿Comprendes para qué sirve este mundo absurdo y para qué ha sido creado? Ni toda la ciencia del mundo vale lo que las lágrimas de esa niña que implora a Dios mientras se encuentra encerrada en el baño, sucia de sus propios excrementos". Lo que resulta intolerable y absolutamente inhumano es hacer del sufrimiento del inocente el material y el abono para preparar a bien de todos la armonía futura. Aunque sea verdad que "en el fin del mundo, en el momento de la armonía eterna, se cumplirá y se revelará algo tan precioso que bastará para colmar todos los corazones, para saciar a todos los descontentos, para redimir todas las maldades de los hombres, toda la sangre que se haya vertido, ..qué me importa el infierno por los criminales, ¿qué puede arreglar el infierno cuando los niños ya han sufrido su martirio? Y ¿qué armonía es ésta, si hay infierno"? El problema del mal es verdaderamente el obstáculo más serio para creer que Dios es Padre, que es Amor y que todo está bajo el control de su Providencia. Sobre todo nos pone en crisis el sufrimiento de los inocentes. ¿Qué culpa tienen ellos, decimos, para sufrir tanto? La única respuesta que podemos dar a esta dificultad, que nos pone en crisis, es mirar a Jesucristo crucificado. Mirándolo a él no podemos decir que Dios no nos ama. Nos ama tanto que envió a su único hijo para que se hiciera como uno de nosotros y nos rescatara del mal. Prefirió dejar a su hijo morir en la cruz para demostrarnos su infinito amor. Ni Dios puede doblar nuestra voluntad que se rebela, pero puede dar un testimonio de amor tan grande que nos puede convencer. No obstante todo el mal del mundo, podemos creer que Dios nos ama y nos tiene preparado una felicidad definitiva después de esta vida. 243º ¿Creen los pastores en lo que predican? A principio del año 1992 el obispo protestante sueco Jonás Anders Backstrom, hizo una encuesta entre todos sus pastores y ministros en la que les preguntaba sobre sus convicciones personales en materia de fe. Insistió en una dos condición importante: contestar la verdad bajo palabra de honor. El anonimato de cada uno sería escrupulosamente respetado. La pregunta llave del cuestionario era la siguiente: ¿Cree Ud. .en lo que predica? Un 70% de los pastores contestaron que no. La periodista que firmaba el reportaje ampliaba así esa información: "La mayoría opina que las pláticas religiosas de cada Domingo son "una especie de representación de teatro" ya que los pastores no están convencidos de que lo que predican es verdad" C.Vallés Querida Iglesia pag. 72) Y si hicieran una encuesta a nuestros cura párrocos, agentes de pastoral, catequistas etc.? ¿Cómo serían las respuestas? En lo que se refiere a las verdades fundamentales del cristianismo, no hay duda, hay unanimidad. Pero no se podría decir lo mismo en cuanto a la moral. Aquí las opiniones son bastantes disparejas y el pueblo no instruido se siente muchas veces desorientado. Hace falta, como insistió Juan Pablo II volver a leer y practicar las orientaciones del Concilio Vaticano II. 248º El explorador se arrepintió de haber dibujado un mapa de las Amazonas. El explorador había regresado junto a los suyos, que estaban ansiosos por saberlo todo acerca del Amazonas. Pero, ¿cómo podía él expresar con palabras la sensación que había inundado su corazón cuando contempló aquellas flores de sobrecogedora belleza y escuchó los sonidos nocturnos de la selva? ¿Cómo comunicar lo que sintió en su corazón cuando se dio cuenta del peligro de las fieras o cuando conducía su canoa por las inciertas aguas del río? Y les dijo: "Vayan y descubran Uds. mismos. Nada puede sustituir el riesgo y la experiencia personales". Pero, para orientarles, les hizo un mapa del Amazonas. Ellos tomaron el mapa, hicieron copias del mismo, lo colgaron en la pared de su sala de estar, y así, todos los que tenían una copia de la Amazonas se consideraban unos expertos. ¿No concocían acaso cada vuelta y cada recodo del río? y cuán ancho y profundo era y dónde habia rápidos y donde se hallaban las cascadas? El explorador se lamentó toda su vida de haber hecho aquel mapa. Habría sido preferible no haberlo hecho. Cuentan que Buda se negaba resueltamente a hablar de Dios. Probablemente sabía los peligros de hacer mapas para expertos intelectuales. Así sucede a los que cren conocer el cristianismo por saber de memoria algunas respuestas del catecismo. 249º El palacio del rey indio resultó tan pequeño que casi no se veía. Un rey indio hizo construir un palacio. Fue el palacio más maravilloso que jamás se hubiera construido sobre la tierra, y cuando estuvo concluido, el rey ordenó que el mejor pintor del reino hiciera un cuadro donde se viera todo el palacio en su esplendor como era en la realidad. El pintor aceptó, pero puso una condición: que nadie mirara el cuadro hasta que estuviese terminado.. Al cabo de unos meses el pintor llamó al rey y descubrió el cuadro en su presencia. El rey miró sin salir de su asombro. En un gran lienzo vio pintado un bosque y un río y una alta montaña y un cielo azul. "Pero - exclamó - ¿dónde está mi palacio?". El maestro sonrió y señaló dulcemente: "Si su majestad se fina bien, allí, al pie de la montaña, al borde de la selva, hay un puntito. Ese es su palacio" Ya, antes de que el asombro del rey se cambiase en protesta, añadió: "Su majestad me ordenó que pintara el palacio tal como es en realidad. Pues bien, en la realidad de la creación de Dios, su palacio es tan solo un puntito insignificante". 250º Un sacerdote católico, apuñalado por satánicos, exclamó: Fue un accidente laboral”. Una secta satánica, LOS HERMANOS como todas ellas formadas por gente brillante, con título universitario y con rentas altas, apuñaló al sacerdote Priscilo Ruiz Picazo, más que nada para que dejara de investigar sobre ellos, porque los satánicos no son, como quien dice muy transparentes. Más bien les gusta la opacidad, como las grandes multinacionales y a los dictadores Digo que tiene sentido del humor porque, desde su cama del hospital, el bueno don Priscilo afirmó que la celada que le tendieron (un falso aviso sobre rituales macabros le llevó hasta un lugar recóndito de Valencia y allí le apuñalaron) y que lo puso a las puertas de la muerte, fue un "accidente laboral" Y otra nota curiosa es que don Priscilo no interpuso denuncia alguna, a pesar de saber quiénes son y por qué quisieron matarle. Será que no confiaba en la acción de la policía? No es que dude de la eficacia de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado. Simplemente, la policía, al igual que el resto de las instituciones públicas, es prisionera de los dogmas de la modernidad. Diario de Valencia 21 de 12 de 2000 251 Tía Rosa renunció a casarse para hacer de madre a sus sobrinos huérfanos. Escribe Martín Descalzo: Recuerdo aquella tía Rosa que tanto me impresionó en mi infancia . Era la tía de mi amigo Manolo y sus cinco hermanos, e indirectamente de toda la pandilla de nuestro curso. Tardé mucho tiempo en saber que no era su madre natural. Rosa estudiaba medicina en Madrid y tenía novio con el que estaba a punto de casarse. Murió su hermana, que era madre de seis chicos y ella abandonó todo para encargarse de aquellos sobrino suyos. Dejó su vida, dejó sus esperanzas, dejó de lato su amor y se entregó a otro amor menos personal y más sacrificado. Recuerdo que había en aquella mujer algo que me desconcertaba de niño; una extraña mezcla de cariño y de distancia. Comencé a pensar que aquella forma de amar era un resto de amargura, hasta que llegué a tener compasión de ella y a considerarla como una solterona amargada. Muchos años después descubrí que era exactamente lo contrario. Me explicó ella misma que "una tía debe suplir a una madre, pero nunca sustituirla". Ella debía conseguir que a mis amigos n9 le faltase nada, pero que no olvidaran nunca que su madre ya no estaba con ellos. Y por eso ella mantenía una cierta distancia para que sus sobrinos no la quisieran demasiado. Descubrí que la tía Rosa tenía miedo a que, sobre todo los pequeños, llegaran un día a quererla tanto que olvidasen a la madre muerta. Aprendí mucho de aquella mujer, porque precisamente como sacerdote sé muy bien que nosotros hemos de vivir esa misma comedia: transmitir a la gente el amor de Cristo, cuidando mucho de que la gente dirija su amor hacia el mensaje y no hacia el mensajero, hacia el Cristo a quien representamos y no a nosotros como simples testigos. Tenemos que amar sin preocuparnos demasiado del agradecimiento. Como Juan el Bautista que decía: "Es necesario que él crezca y que yo disminuya"(Jn 3,30) así los padres y educadores tienen como ideal desaparecer una vez que se haya realizado el contacto de amistad entre la persona y Jesucristo Para que un sello pueda pegarse al sobre hay que mojarlo con la saliva, indispensable para que se realice el contacto y la unión. Nosotros como padres y educadores, tenemos que servir como intermediarios entre nuestros hermanos y Jesús, que nosotros conocemos pero que ellos no conocen o no aman. Los padres, por ejemplo, tienen que hacer un paso al costado cuando los hijos se preparan a formar un nuevo hogar: "El hombre deja a sus padres para unirse a una mujer y formar con ella un solo ser" (Gn 2,24) 252º El hada me dijo que todos necesitaban de mí. Hay una hermosa fábula que cuenta que una niña iba caminando por una pradera cuando vio a una mariposa atravesada por una espina. Con mucho cuidado la liberó y la mariposa se alejó volando. Pero muy pronto regresó; se había convertido en una hermosísima hada. He vuelto, - le dijo a la pequeña - para compensarte de tu bondad. Pídeme lo que quieres y te lo daré. Sin demorar un instante la pequeña le respondió: !Quiero ser feliz" Entonces el hada se inclinó sobre ella y le susurró al oído unas palabras y luego desapareció. En la medida en que la niña crecía se sentía siempre más feliz; nadie en el pueblo era más feliz que ella. Con insistencias las amigas le andaban preguntado :"¿Cual es el secreto de tu felicidad? ¿Qué te dijo el hada? Pero ella sonría y solamente respondía. "escuché una palabras que me dijo al oído" Envejeció también la niña y estaba por morir. Los vecinos, temerosos de que se secreto muriera con ella, la rodearon diciéndole "antes que te vaya, cuéntanos lo que te dijo el hada. Y ahora sí que la anciana respondió: "El hada me dijo sólo esto: “TODOS, AUNQUE LOS QUE PARECEN MÁS SEGUROS, TE NECESITAN” S .Pablo en la primera carta a os Corintios compara a la iglesia a un cuerpo en el que todos los miembros son importantes, y nadie puede vivir sin el aporte de los demás. "El cuerpo no se compone de un solo miembro sino de muchos....todos los miembros se preocupan lo mismo los unos de los otros. Si sufre un miembro, todos los demás sufren con él" (1 Cor 12) Ya el famoso dicho de Jesús recogido por Lucas en los hechos de los apóstoles: "Mayor felicidad hay en dar que en recibir". (He 20,35) Algunos chistes para amenizar la catequesis 253º El paso del mar rojo puesto al día. Habiendo preguntado a mi hijo Roberto de diez años lo que le había enseñado la catequista, contestó: "La maestra nos contó que Dios mandó a Moisés detrás de las líneas enemigas a rescatar a los israelitas de los egipcios. Cuando llegaron al Mar Rojo, Moisés ordenó al batallón de zapadores construir un puente de pontones. Cuando todos los israelitas habían cruzado el puente, miraron atrás y vieron que tenían los tanques de los egipcios. Moisés entonces llamó al cuartel general por su radio de campaña y pidió una escuadrilla de bombarderos que volaran el puente y salvaran así a los israelitas. "¡Hijo mío!" - exclamó la madre - ¿es así cómo te ha contado esa historia la maestra?" "Bueno...no justamente así. Pero si te la contara como ella nos la contó, jamás la creerías" 254º El juez compasivo "Acusado", dijo el juez, "te he encontrado culpable de 23 crímenes. Por tanto te condeno a un total de 175 años de cárcel." El acusado, un anciano, rompió a llorar. La expresión del juez se endulzó y dijo: "Pero no quiero ser cruel. Sé que la condena es muy severa. Realmente no tiene usted que cumplirla en su totalidad". En los ojos del condenado brilló una luz de esperanza. "Eso está mejor" dijo el juez. "Limítese a cumplir todos los años que pueda" 255º La edad de la otra pierna. El médico le dice a un paciente: "Este dolor que siente usted en su pierna es producto de su avanzada edad". Y el paciente le respondió: "¿Se cree que soy tonto? La otra pierna tiene la misma edad y no me duele". 257º ¿Dónde hay que buscar lo perdido? Estaba Nasrudin buscando bajo un farol un manojo de llaves que había perdido. Un amigo se le acerca y le ayuda a buscar aquel manojo de llave. Pasaban buscando con mucha atención más de una hora, cuando el amigo preocupado le pregunta: Pero ¿dónde perdiste las llaves? Y Nasrudín le respondió: "en el jardín de mi casa". Y ¿ por qué las estás buscando aquí entonces? Porque en mi jardín no hay luz, mientras que aquí se ve muy bien. . 258º Tener fe es también confiar en los demás. La casa de Nasrudin estaba ardiendo de manera que él tuvo que subir a la azotea para ponerse a salvo. Se puso a gritar pidiendo socorro y sus amigos se reunieron en la calle y, tendiendo una gran manta en las manos, le gritaron: “Salta, Nasrudin, salta” “Ni pensarlo” contestó Nasrudín. “No confío en ustedes. Les conozco de sobra y sé que, si salto, ustedes son capaces de retirar sus manos de la manta y me voy a chocar en el suelo. No confío en ustedes. “No seas estúpido” le gritaron los amigos. No estamos bromeando; salta”. Y Nasrudin, siempre desconfiado, les dijo: “No confío en ninguno de ustedes. Dejen la manta en el suelo y saltaré. No podemos no confiar en los demás. La persona humana es constitutivamente interpersonal, intersubjetiva, un yo con un tú para formar el nosotros Sin la relación de conocimiento y de amor, el hombre sería solamente un animal social, como lo son muchas especies de animales. La relación de un sujeto con otro sujeto es tan constitutiva del ser humano que el egoísmo, la soledad total y el individualismo constituirían una especie de suicidio. La persona humana se realiza en la línea del reconocimiento y del amor. Un dicho italiano nos dice que: confiar el bueno, desconfiar es mejor” Pero una cierta prudencia y atención son necesarias porque, lamentablemente, no todos los hombres merecen nuestra total confianza. |